Nicaragua despertó este domingo con un aire de alegría que no se veía desde hace varios años. La recién coronada Miss Universo 2023, Sheynnis Palacios, es una nativa de este país centroamericano con alrededor de 6 millones de habitantes, según datos del Banco Mundial. En los últimos años, Nicaragua ha estado en el centro de la atención internacional debido a una crisis sociopolítica que se desató en 2018, provocando la partida de miles de nicaragüenses del país.
Sheynnis Palacios, originaria de Diriamba, Carazo, nació en una familia modesta y su ascenso hacia la cima no fue casualidad. Fueron años de preparación basados en esfuerzo, perseverancia y fe. En la víspera del concurso, compartió en su cuenta de X (antes Twitter): «Llegamos al día más esperado por mi niña interior».
18 de noviembre – gala final MISS
— Sheynnis Palacios Cornejo (@sheynnis) November 18, 2023
UNIVERSO🇳🇮✨
Llegamos al día más esperado por mi niña interior y que ahora es un sueño acompañado por más de 6 millones de nicaragüenses🫶🏼 #72MISSUNIVERSE pic.twitter.com/FxOx6756n2
Antes de representar a Nicaragua en Miss Universo, participó en otros cinco concursos, siendo coronada como la reina adolescente del país en 2016. Además, compitió en el certamen Miss Teen Universo 2017, donde quedó entre las seis finalistas. Posteriormente, se alzó como Miss Mundo Nicaragua 2020 y llegó a ser una de las 40 finalistas en el concurso internacional.
Su vida no ha estado exenta de controversias. En el contexto político de 2018, Sheynnis y su madre emprendieron un negocio de venta de buñuelos, un postre nicaragüense elaborado a base de yuca. Una vez que su emprendimiento se hizo conocido, sufrió acoso y burlas por parte de quienes menospreciaron su esfuerzo.
La lucha de Sheynnis como mujer, soñadora y emprendedora, nacida en uno de los países más pobres del continente, va más allá de los concursos de belleza. Ella misma ha afirmado ser de una familia de clase económica baja.
Mientras se anunciaba la coronación de la nueva Miss Universo en San Salvador, en todos los rincones donde había un nicaragüense, resonaban gritos de asombro, emoción y orgullo. En las pantallas de televisión se mostraba a una mujer que, entre lágrimas, expresaba su amor por su madre frente a una cámara.
Su historia
La madre de Sheynnis Palacios reside en Estados Unidos, donde emigró en busca de oportunidades hace algún tiempo. Por esta razón, no pudo presenciar la coronación de su hija en persona. Desde la partida de su madre, la nueva Miss Universo ha vivido con su abuela y su hermano menor. «Cuando tuve a Sheynnis, tenía 19 años, estaba en la universidad y tuve que decidir entre seguir mi vida o brindarle a mi hija lo que ella necesitaba», mencionó Raquel Cornejo, su madre, en una entrevista a un medio nicaragüense en 2020.
Sheynnis no ha sido indiferente a la realidad de su país. Según sus publicaciones en redes sociales, participó en las protestas contra el régimen sandinista en 2018. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU reportó que durante estas manifestaciones, la dictadura cometió «graves y sistemáticas violaciones a los derechos humanos, incluyendo crímenes de lesa humanidad».
Sheynnis es graduada en Comunicación Social de la Universidad Centroamericana y obtuvo su título pocos meses antes de que las autoridades nicaragüenses decidieran cancelar la personería jurídica de la universidad, acusándola de ser «un centro de terrorismo, ejecutor de traición y violador del orden constitucional», acusaciones que la institución jesuita ha rechazado como «falsas e infundadas».
Sin embargo, su principal labor social y altruista se ha centrado en la salud mental, a través de la iniciativa «Entiende tu Mente», donde entrevistaba a especialistas. Esta plataforma nació a raíz de su propia experiencia con la ansiedad.
Luis Pastor, reconocido cantautor nicaragüense, colaboró con ella en este proyecto y la describe como una mujer con «facilidad para expresarse, inteligente, con chispa, alegría, una sonrisa y con ganas de contribuir a la sociedad».
Justo antes de Miss Universo, Luis Pastor lanzó la canción «La Nicaragüita de mi amor» en apoyo a lo que Palacios estaba haciendo en el concurso. «La relación de la canción con ella es que ambos coincidimos en lo que intenté plasmar en mi letra: el amor que sentimos por Nicaragua, que nos convierte en fuerza, optimismo, ternura, en desafíos, en la mejor manera de amar, cuidar, fomentar y compartir nuestro país», comentó el cantautor.
Durante la competición, ante el jurado, Sheynnis expresó que si pudiera vivir un día en los zapatos de otra mujer, escogería a Mary Wollstonecraft, una escritora inglesa que en el siglo XVII abogaba por la igualdad de oportunidades para las mujeres.
Como Miss Universo, tiene la oportunidad de seguir los pasos de Wollstonecraft. Sin embargo, para los nicaragüenses, ella ya ha dejado un legado en su país, demostrando, sobre todo a las niñas, que independientemente del origen y las dificultades del entorno, los sueños son alcanzables, siguiendo así el legado del poeta nicaragüense Rubén Darío: «Si pequeña es la patria, uno grande la sueña».