‘Aprender a Desaprender’ con su fundador Pedro Pablo Carrillo lanzó recientemente una petición de una iniciativa de ‘Ley de Salud Mental’.
Esto a través de la plataforma Change.org para solicitar al Gobierno de Quintana Roo, la creación de una clínica psiquiátrica.
Que en ella se pudiera atender los casos urgentes de problemas de salud mental, como la depresión, la ansiedad y otros trastornos mentales.
El estado ocupa a nivel nacional el quinto lugar en suicidios, siendo en su mayoría jóvenes. Al año se contabilizan mil 417 casos de depresión, un trastorno mental frecuente.
Quintana Roo no cuenta con una clínica para atención de casos urgentes de ansiedad, depresión y otros problemas de salud mental.
En el estado no existen suficientes instituciones gubernamentales para acompañar a la población quintanarroense de forma accesible y en el mejor de los casos gratuitamente.
Los pocos servicios gubernamentales que atienden la ‘Salud Mental’ son de carácter ambulatorio; si los casos son graves, tienen que ser trasladados a otros estados para una mejor atención y con bajo costo.
Los servicios privados que atienden estas dificultades son muy costosos y de poco abasto; para la población en situación de pobreza y vulnerabilidad, los deja aún más desprotegidos.
Propuesta a la ‘Ley de Salud Mental’
Esta propuesta plantea que por meta principal esté la creación de una clínica gubernamental capaz de atender todos los casos mencionados con anterioridad.
De igual forma que tener un cuerpo normativo en esta área de la salud mental, con una estructura con protocolos de atención, un presupuesto y capacidad operativa para atender a la población.
Pedro Carrillo, fundador de ‘Aprender a Desaprender’ comentó que ‘ha sido testigo de la necesidad de un hospital psiquiátrico’, al igual que por lo menos existan políticas públicas dispuestas a tratar estos temas de salud mental.
Tales como la prevención, intervención, centros de atención en los municipios, psicólogos y psiquiatras trabajando en conjunto para la atención de la población y apostarle al bienestar.