México y EE. UU. pactan formar una coalición para atender el flujo migratorio

En un encuentro trascendental entre el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y altos funcionarios de los Estados Unidos, se acordó la creación de un grupo de trabajo enfocado en abordar la problemática migratoria. Esta iniciativa, que busca involucrar a naciones expulsoras de migrantes de Centroamérica y Sudamérica, representa un hito significativo en la cooperación bilateral.

La reunión, descrita como «excelente» por la canciller mexicana, Alicia Bárcena, se centró en temas críticos para ambas naciones, entre ellos la migración, la economía y el empleo. Bárcena subrayó que este encuentro allanó el camino para futuros diálogos, programando un próximo encuentro para finales de enero, reafirmando así los lazos de amistad y compromiso mutuo.

«Ha sido una reunión muy productiva en la que reafirmamos nuestra amistad, compromisos y trabajo conjunto», comentó Bárcena tras el cónclave.

La funcionaria detalló que durante las extensas tres horas de conversación se discutió el tema migratorio, pero también se abordaron aspectos relacionados con la interdependencia económica entre ambos países, haciendo hincapié en la importancia de reabrir los cruces fronterizos, un aspecto prioritario para ambas naciones.

Bárcena enfatizó que, a pesar del contexto de un flujo migratorio sin precedentes en el último año, la delegación estadounidense, liderada por el secretario de Estado Antony Blinken, no solicitó medidas específicas para reforzar el control migratorio.

En este contexto, reiteró el interés mutuo de continuar trabajando en conjunto para abordar la problemática migratoria. Se anunció la formación de un equipo de trabajo conjunto, que incluirá a autoridades de EE. UU., Guatemala y otros países de Sudamérica y Centroamérica. Este equipo se reunirá a fines de enero para establecer estrategias concretas.

«Estamos comprometidos a sostener reuniones periódicas», afirmó la canciller mexicana, resaltando la importancia de la respuesta positiva de las autoridades estadounidenses a la invitación del presidente mexicano en un momento geopolítico complejo.

En resumen, este encuentro ha sentado las bases para una colaboración multinacional en la gestión del fenómeno migratorio, mostrando una voluntad conjunta para abordar este desafío común en la región.