El gobierno de Joe Biden en Estados Unidos ha decidido posponer los planes para reabastecer las reservas de emergencia de petróleo del país debido al aumento en los precios del crudo, que ha superado los 80 dólares por barril. El Departamento de Energía ha cancelado la compra de 6 millones de barriles para la reserva estratégica esta semana.
En 2022, durante la presidencia de Biden, se utilizó significativamente parte de la reserva estratégica para intentar frenar el aumento en los precios de la gasolina, retirando 180 millones de barriles, dejando el depósito cerca del 50% de su capacidad de 700 millones de barriles, el nivel más bajo desde la década de 1980.
El gobierno seguirá comprometido con la estrategia de reabastecer la Reserva Estratégica de Petróleo, aunque ahora recurrirán a la devolución selectiva de reservas y cancelarán ventas planeadas de petróleo cuando sea necesario, en coordinación con el Congreso.
Aunque comenzaron a reabastecer la reserva a principios de este año con la adquisición de 6.3 millones de barriles y la cancelación de ventas programadas para los próximos tres años, la secretaria de Energía, Jennifer Granholm, mencionó que esto podría no finalizar durante la actual presidencia de Biden, que terminará en enero de 2025.
Se destacó que Estados Unidos conserva reservas suficientes que están listas en caso de una emergencia que requiera que las autoridades echen mano de los depósitos, los cuales se encuentran en cavernas salinas en Luisiana y Texas.
El aumento en los precios de la gasolina en EE. UU. ha sido significativo, alcanzando un dólar por litro, en comparación con 93 centavos de dólar por litro a mediados de mayo, según datos del auto club AAA.