La reconocida actriz británica Glenda Jackson, quien se convirtió en una estrella internacional en la década de 1970, falleció a la edad de 87 años, según confirmó su agente. Jackson dejó una huella imborrable en la industria del cine y el teatro, recibiendo el reconocimiento de la Academia con dos premios por sus destacadas interpretaciones en «Mujeres enamoradas» (1969) y «Un toque de distinción» (1973), además de haber sido nominada en dos ocasiones más.
Uno de sus roles más aclamados fue su interpretación de la reina Isabel I en el destacado drama de la BBC, «Elizabeth R.» La versatilidad y el talento de Jackson la llevaron a ganarse el respeto y la admiración de la crítica y el público por igual.
Aunque su carrera en el mundo del espectáculo fue impresionante, Jackson también demostró un fuerte compromiso con la política. En 1992, abandonó la actuación para unirse a la Cámara de los Comunes británica como diputada laborista por el norte de Londres, cargo que desempeñó hasta 2015. Incluso llegó a ocupar el puesto de ministra subalterna de Transporte bajo el gobierno del Nuevo Laborismo de Tony Blair.
Inspiro al escritor Julio Cortázar
La figura de Glenda Jackson trascendió el ámbito artístico y también inspiró al reconocido escritor argentino Julio Cortázar. Su interpretación en el cine fue la musa detrás del cuento de Cortázar titulado «Queremos tanto a Glenda». El relato narra la historia de un grupo de fanáticos cinéfilos obsesionados con la actriz Glenda Garson, personaje basado en la propia Jackson. El cuento dio nombre al libro homónimo, publicado en 1980, donde se incluyó esta fascinante historia.
Con la partida de Glenda Jackson, tanto la industria del entretenimiento como el ámbito literario lamentan la pérdida de una talentosa y comprometida artista cuyo legado perdurará en la memoria de todos aquellos que admiraron su trabajo y fueron cautivados por su actuación inigualable.