El Pentágono anunció el domingo que el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, fue ingresado nuevamente en un hospital, generando atención y preocupación pública. Esta hospitalización, mantenida en secreto, se suma a una serie de episodios similares que han generado controversia en los últimos meses.
Según informó el portavoz del departamento, Pat Ryder, Austin fue trasladado a un centro militar en las afueras de Washington debido a lo que parece ser un problema de vejiga. El Secretario de Defensa había sido previamente diagnosticado con cáncer de próstata y sometido a una cirugía reciente.
La ausencia de Austin de la escena pública desde finales de diciembre y nuevamente a principios de enero se debe a complicaciones en su tratamiento contra el cáncer, un diagnóstico y tratamiento que inicialmente mantuvo en secreto tanto del presidente Joe Biden como del resto del gobierno.
En esta ocasión, el público fue informado aproximadamente dos horas después de que Austin fuera ingresado en el hospital, lo que resalta la delicada naturaleza de su estado de salud. Ryder afirmó que Austin fue trasladado al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed para recibir atención por síntomas que indicaban un problema emergente de vejiga. Además, se aseguró que tanto el subsecretario de Defensa como el jefe del Estado Mayor Conjunto fueron informados, junto con notificaciones a la Casa Blanca y al Congreso.
A pesar de su hospitalización, se indicó que Austin mantendrá sus funciones y obligaciones como Secretario de Defensa. Esta nueva hospitalización llega después de que Austin se disculpara a principios de este mes por mantener en secreto las anteriores hospitalizaciones, admitiendo que debería haber informado al presidente sobre su diagnóstico de cáncer.
Estas ausencias no reveladas, junto con la actual hospitalización, ocurren en un momento crítico para Estados Unidos, con una serie de desafíos en Oriente Medio y el continuo apoyo de Washington a Israel, lo que ha provocado ataques casi diarios de combatientes respaldados por Irán contra fuerzas estadounidenses en Irak y Siria.
Además, Austin desempeña un papel crucial en los esfuerzos de la administración Biden para respaldar la lucha de Ucrania contra la invasión rusa, en medio de la negativa de los congresistas republicanos a autorizar nuevos fondos para la ayuda militar a Kiev. Su estado de salud y su capacidad para ejercer sus funciones serán seguidos de cerca en medio de estas complejas dinámicas geopolíticas.