Un Boeing 747 de carga perteneciente a la aerolínea Atlas Air experimentó un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto internacional de Miami en la noche del jueves, apenas minutos después de despegar. La dramática escena fue grabada por testigos que presenciaron el avión soltando llamas sobre el cielo nocturno de Florida.
La Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) se encuentra actualmente investigando el incidente, intensificando su atención sobre el fabricante estadounidense Boeing. Esta investigación surge tras un incidente anterior, en el cual un vuelo de Alaska Airlines, operado con un modelo diferente (Boeing 737 Max 9), perdió una puerta en pleno vuelo a principios de este mes.
Según un informe preliminar de la estación local de la cadena NBC News en el Sur de Florida, se descubrió «un agujero del tamaño de una pelota de sóftbol» encima de uno de los motores del avión de carga de Atlas Air. El vuelo, que tenía como destino el aeropuerto internacional Luis Muñoz Marin en Puerto Rico, se vio obligado a regresar y realizar un aterrizaje de emergencia en Miami alrededor de las 10:30 de la noche debido a un fallo en los motores, apenas ocho minutos después de despegar.
La tripulación, compuesta por cinco miembros, siguió los protocolos de emergencia, y la aerolínea aseguró que el avión aterrizó de manera segura. Sin embargo, la escena impactante del avión en llamas fue capturada en un video por Melanie Adaros, una residente que se encontraba a unas 15 millas del aeropuerto. La grabación se hizo viral en las redes sociales, mostrando la preocupación de los espectadores ante la incertidumbre del momento.
En las llamadas de emergencia realizadas por el piloto, se informó que el avión experimentó un incendio en uno de sus motores. Atlas Air, especializada en el traslado de maquinaria, alimentos y productos farmacéuticos, así como en servicios chárter para pasajeros, emitió un comunicado confirmando el aterrizaje seguro y destacando la actuación de la tripulación.
Este incidente ocurrió apenas dos semanas después del problema con un Boeing 737 Max 9 de Alaska Airlines, donde una pieza se desprendió en pleno vuelo de pasajeros. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte está investigando el incidente de Atlas Air, y Boeing ha expresado su apoyo a la investigación realizada por la NTSB, según informes de NBC News. La serie de eventos recientes está generando una mayor atención sobre la seguridad de los vuelos comerciales y la fiabilidad de los aviones Boeing.