Megan Rapinoe, futbolista de la Selección Femenil de los Estados Unidos que lucha por la igualdad de género en el deporte y también la que puso en su lugar al presidente de Estados Unidos de América, acaba de coronarse como campeona de la copa mundial femenil con su cuarto titulo consecutivo.
Brilló junto con su equipo durante todo el torneo que jugó en Francia. Es una de las grandes jugadoras más experimentadas de la selección, no sólo se convirtió en la campeona del mundial femenil, capitana del equipo y bicampeona del mundo, sino que también se ha convertido en la voz de los derechos de la mujer.
Rapione se mantuvo en el ojo de críticas después de sus declaraciones donde dejaba en claro que en caso de ganar la copa del mundo no asistiría a la Casa Blanca.
Trump la desafió expresando “primero debes ganar antes de hablar”. Sin embargo, la ahora campeona consiguió no sólo ganar el cuarto titulo, sino que fue el Balón y Bota de oro del mundial.
Aseguró que le están dando poco valor a la copa del mundo femenil, a diferencia de un mundial varonil.
“Es un insulto para el fútbol femenino, es una idea terrible jugar la final de la Copa América y la Copa Oro el mismo día que nuestra final. Hablamos de una final mundial, debería paralizarse todo en el fútbol para darnos visibilidad”, dijo.