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    PatrocinadoBeneficios del Spa en tu salud física y mental

    Beneficios del Spa en tu salud física y mental

    Opinión

    Patrocinado por: NIZUC Spa by ESPA

    Conoce los beneficios que el Spa que puede tener en tu salud física y mental, ya es hora que nos empecemos a preocupar por nosotros este 2021.

    Se sabe que muchas veces el acudir a un spa puede ser costoso o incluso difícil de encontrar uno de calidad, sin embargo es algo que debemos disfrutar y experimentar para el beneficio de nuestra salud.

    De estas manera te beneficia el spa

    Beneficio físico

    la hidroterapia activa el sistema inmunológico, eleva el metabolismo y previene la hipertensión. Por lo que en un Spa, se consigue una relajación muscular, haciendo que los dolores de espalda, reumáticos y musculares disminuyan.

    También mejoran los problemas digestivos, del aparato urinario y la próstata. El Spa es recomendable en trastornos femeninos, enfermedades nerviosas y alteraciones de las vías respiratorias.

    Beneficio psicológico:

    Los tratamientos en un Spa, consiguen que la persona se aísle del exterior, olvidando el estrés y centrándose en su propio cuerpo. Al relajar el cuerpo la mente también se relaja y, el malestar psíquico desaparece.

    Además, te mantiene lejos de tu rutina diaria, trata de disfrutar de una sesión de Spa un fin de semana o un viernes después del trabajo.

    Beneficio estético:

    La mayoría de los Spa ofrecen diferentes tratamientos de belleza (peeling corporal, hidratación facial, masaje reductor y anticelulítico, etc.).

    Por eso nosotros te recomendamos una total experiencia de relajación, lujo y masajes en el Hotel Nizuc Resort & Spa.

    Este resort tiene una de las mejores opciones para que te relajes en su spa, ya sea en la cabina de masajes, disfrutes de un facial hidro o en su novedosa experiencia termal.

    Un tratamiento spa en una vida cada vez más estresante y atareada son necesarios; más en estos tiempos incierto, te quedará como ‘anillo al dedo’.

    Así que, para restaurar nuestro equilibrio interno y externo, hay que volver a amoldarnos a los ritmos vitales propios.

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