YouTube defendió su decisión de eliminar la grabación de la conferencia de prensa del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, del 22 de febrero, citando sus políticas contra el acoso y el bullying. Esto se produjo después de que el mandatario acusara a la plataforma de censurarlo.
López Obrador criticó a YouTube, calificando su acción como «prepotente y autoritaria», expresando su descontento a través de su cuenta de X (anteriormente Twitter). Un portavoz de YouTube informó que la política de la plataforma prohíbe el contenido que divulga información de identificación personal, como números de teléfono, lo que justificó la eliminación del video.
Desde el sábado, en lugar de la conferencia matutina del 22 de febrero, la plataforma mostraba un mensaje indicando que el video había sido eliminado por infringir la política de acoso y bullying de YouTube. Sin embargo, para el domingo, los canales oficiales del presidente y del Gobierno de México volvieron a subir la grabación, editando la parte donde se filtraban los datos de una periodista.
Durante la conferencia de prensa del lunes, López Obrador descartó abandonar el uso de YouTube, pero reiteró su percepción de la eliminación como censura. Además, instó a los «dueños de YouTube» a investigar, insinuando que la empresa estaba influenciada por conservadores, aunque no presentó pruebas de esta afirmación.
La política de acoso y bullying de YouTube prohíbe cualquier contenido que involucre insultos, calumnias prolongadas u otros comportamientos perjudiciales, como amenazas o doxxing. El doxxing, que implica la revelación de información personal en línea sin consentimiento, fue el tema central de la controversia tras la conferencia del 22 de febrero, cuando López Obrador divulgó datos personales de una periodista del New York Times.
Esta acción provocó críticas de organizaciones como el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) y el Instituto Nacional de Transparencia (INAI), quienes consideraron la revelación de datos personales como una violación de la privacidad y una amenaza para la seguridad de los periodistas.
En resumen, el conflicto entre López Obrador y YouTube destaca la tensión entre la libertad de expresión y las políticas de privacidad en el entorno digital, así como la responsabilidad de las plataformas en la protección de la integridad de sus usuarios y la prevención del acoso en línea.