Este 14 de agosto, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) declaró oficialmente a Claudia Sheinbaum como la próxima presidenta de México, tras validar el cómputo final de los comicios del pasado 2 de junio. La coalición encabezada por la morenista obtuvo un total de 35 millones 924 mil 519 votos, lo que representa el 59.75% de los sufragios, consolidando su victoria en la contienda electoral.
Durante la sesión pública de este miércoles, los magistrados del TEPJF se reunieron para discutir y votar el dictamen relativo al cómputo final de la elección, la determinación de validez y la proclamación de la presidencia electa de México. El dictamen fue aprobado con la validación de cinco puntos clave: primero, que Claudia Sheinbaum recibió la mayoría de los votos; segundo, que el proceso democrático cumplió con los principios constitucionales; tercero, que la presidenta electa cumple con los requisitos de elegibilidad establecidos en los artículos 82 y 83 de la Constitución; cuarto, se le declara como la primera presidenta electa de México, quien se desempeñará en el periodo comprendido del 1 de octubre de 2024 al 30 de septiembre de 2030; y quinto, se ordena expedir la constancia de mayoría y validez.
Debate entre los magistrados
Durante las intervenciones, los magistrados destacaron la importancia de las instituciones involucradas en el proceso democrático y la voluntad ciudadana expresada en las urnas. Sin embargo, la magistrada Janine Otálora Malassis señaló tres críticas que consideró importantes de visibilizar, como precedentes para futuros procesos electorales: la intervención política en los tiempos legales, la participación del presidente Andrés Manuel López Obrador en el proceso y la violencia electoral registrada.
El magistrado Felipe Alfredo Fuentes Barrera resaltó el significado histórico de la elección de Sheinbaum, afirmando que «La elección de Claudia Sheinbaum Pardo como presidenta de México no es solo un avance en la representación política, sino que refleja una transformación profunda en nuestra sociedad. La llegada de una mujer a la presidencia del país representa un avance significativo de décadas de lucha por la igualdad de género y la inclusión política».
Por otro lado, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón subrayó la necesidad de reformar la ley electoral para adaptarse a las realidades políticas actuales, señalando que los partidos y actores políticos adelantaron los tiempos y trasgredieron artículos de la Constitución y de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.
La magistrada presidenta del TEPJF, Mónica Soto, destacó los cambios en la política mexicana impulsados por acciones afirmativas, que obligaron a los partidos a cumplir con cuotas de género y a incluir a grupos vulnerables, marcando un momento histórico al elegir a la primera presidenta de México. «La ciudadanía mexicana que salió a votar está activa, quiere formar parte de la toma de decisiones y encaminar al país hacia propuestas que, desde su libertad, decidió que eran las que más le favorecían», comentó Soto. Además, subrayó que el proceso electoral federal se llevó a cabo conforme a los estándares democráticos y de integridad electoral, garantizando el respeto a la voluntad popular expresada en las urnas.
Con esta resolución, Claudia Sheinbaum se convierte en la primera mujer en asumir la presidencia de México, marcando un hito en la historia política del país y abriendo nuevas perspectivas para la representación de género en la más alta esfera del poder.