Con siete años, el Taller de Arquitectura Contextual (TACO) cuenta con varios galardones nacionales e internacionales. Los hermanos Ana Patrón (interiorista) y Carlos Patrón (arquitecto), y su primo Alejandro Patrón (ingeniero) son los responsables de numerosas obras ubicadas en la Ciudad de Mérida y alrededores
Al momento cuentan con 15 obras, entre las que se encuentran el Pabellón 3E, el Loft Vivero y la Casa Gabriela, Casa del Monte y Casa del Lago. En ellas hay intervenciones (o adaptaciones) en construcciones ya existentes; otras obras (Casa Gabriela, por ejemplo) se construyeron desde cero.
Espíritu colectivo
Aunque podría parecer que los miembros que conforman TACO se pusieron de acuerdo para estudiar sus respectivas carreras y así conformar más tarde un equipo multidisciplinario completo, cada quien estudió lo que quiso y un día se dieron cuenta de que podía complementarse. Entonces sí -ya con sus títulos universitarios- se pusieron de acuerdo para crear TACO.
¿Quién o qué inspira sus obras? Carlos Patrón señala que lo que más los inspira y los motiva es la idea de poder contribuir a la recuperación del espíritu colectivo de la arquitectura que se ha olvidado.
“Y de ser posible, nos gustaría dar a nuestras obras un sentido artístico, entendido éste como la capacidad para generar emociones en las personas”, confirmó.
La obra
Cuando les preguntamos cuáles eran las técnicas arquitectónicas y los materiales que más utilizaban para resolver los problemas propios de la región, nos respondieron que “en la Península de Yucatán los problemas a resolver son las altas temperaturas, la humedad y los huracanes. También hay que resolver el asunto de la intensa iluminación natural y el de los mosquitos. Así es que trabajamos con criterios de sistemas pasivos: ventilación cruzada, evacuación de aire caliente a través de aperturas cenitales. Controlamos la proliferación de moscos por medio de estanques con plantas acuáticas y peces predadores de larvas. Usamos celosías como matizadores de luz y cortadores de viento”.
Enamorados de la luz
En cuanto a materiales, TACO utiliza gravilla y eco-creto permeable. También utiliza el estuco preparado con cemento blanco, polvo de piedra y la resina del ‘chukum’, planta endémica de la Península a la que los antiguos mayas le sacaron un gran provecho.
En el caso de los pigmentos, este equipo de profesionistas de la construcción, los agregan desde un principio al estuco. El óxido lo aplican al final del proceso, es decir, cuando se ha obtenido la textura deseada. Los pigmentos y los óxidos sirven para dar un color permanente que no requiere del mantenimiento que exige, por ejemplo, la pintura.
Y todo indica que TACO está enamorado del agua y la luz. Pensemos en el estanque de la Casa Gabriela, tan decorativo como funcional, o en la luz que se cuela por la celosía del Pabellón 3E.
Interiorismo
TACO entiende el interiorismo como extensión de la arquitectura y siempre en relación con los clientes. “Preferimos los ambientes sobrios, sencillos, resistentes y que no requieren de mucho mantenimiento. Ambientes que -concluyen- le proporcionen comodidad a quien los habita”.
A propósito de Casa Gabriela, TACO recibió la Medalla de Plata en la Primera Bienal Nacional de Jóvenes Arquitecto. Pero hay que agregar que TACO ha recibido más de 15 reconocimientos nacionales e internacionales, otorgados, todos, por instituciones oficiales. Sin embargo, el mayor premio se los da el cliente que les da las gracias por haber
mejorado su calidad de vida.
Finalizamos comentando que TACO no tiene una obra favorita. Quieren sus obras como si fueran sus hijos a los que -hay que señalar- les ponen nombre y apellido: Pabellón 3E (2012), Loft Vivero (2014), Casa Gabriela (2015), Casa del Lago, y un largo etcétera.
También te puede interesar: Casa nueva o usada, ¿cuál conviene?