José Arturo González González, director del Parque Marino Nacional y Área de Protección de Flora y Fauna Manglares de Nichupté, reconoció que la pandemia permitió que algunas zonas coralinas de esta reserva se recuperarán del daño que han tenido a consecuencia del exceso de visitantes y mala calidad del agua.
“Si hubo un descanso de las unidades arrecifales y también tuvimos una recuperación en algunas zonas como la primera barrera, cuevones, manchones y alguna recuperación de la unidad arrecifal y disminuyeron también las cargas de agua clandestinas y mejoró la calidad del agua”, afirmó.
En torno a las descargas, el funcionario federal comentó que no se tiene identificada una fuente puntual, pero por los estudios hechos se sabe que hay nutrientes en la zona a causa de un mal tratamiento.
Resaltó que, al haber más nutrientes en el mar, se generan más algas que afectan a los corales y, por consiguiente, muchas zonas coralinas se ven dañadas.