En los últimos años, es común ver las siglas LGBTIQ+ en medios de comunicación, campañas sociales o debates públicos, pero muchas personas desconocen a fondo qué significa cada letra, cómo se originó esta sigla y por qué ha ido creciendo con el tiempo. A continuación, te explicamos su significado y el contexto que le dio forma.
El origen del término
La sigla LGBT comenzó a usarse en los años 90 como una evolución del término “comunidad gay”, con el objetivo de visibilizar a más grupos dentro de las minorías sexuales y de género. Originalmente incluía solo cuatro letras:
- L: Lesbianas – Mujeres que sienten atracción emocional, afectiva o sexual hacia otras mujeres.
- G: Gays – Hombres que se sienten atraídos hacia otros hombres, aunque el término también se usa de forma general para referirse a personas homosexuales.
- B: Bisexuales – Personas que se sienten atraídas tanto por hombres como por mujeres.
- T: Trans – Personas cuya identidad de género no coincide con el sexo asignado al nacer. Aquí se incluyen mujeres trans, hombres trans y personas no binarias, aunque estas últimas a veces se mencionan de forma específica con otras letras.
Con el tiempo, se incorporaron nuevas letras para reconocer otras identidades y orientaciones, dando paso a la sigla LGBTIQ+.
¿Qué significan las demás letras?
- I: Intersexuales – Personas nacidas con características sexuales (genitales, cromosomas o gónadas) que no encajan en las definiciones típicas de masculino o femenino.
- Q: Queer – Término amplio que se usa para describir identidades u orientaciones que no encajan en las categorías tradicionales. Aunque antes se usaba de forma despectiva, hoy ha sido resignificado como símbolo de resistencia y diversidad. También puede hacer referencia a quienes no quieren etiquetarse.
- +: El signo “más” reconoce la existencia de otras identidades que no están representadas en las letras anteriores. Algunas de las que a veces se incluyen son:
- A: Asexuales (personas sin atracción sexual hacia otros)
- P: Pansexuales (atracción hacia personas independientemente de su género)
- NB: No binarios (personas que no se identifican como exclusivamente hombres o mujeres)
¿Por qué tantas letras?
La ampliación de la sigla responde a una intención inclusiva: visibilizar a todas las personas cuyas identidades u orientaciones han sido históricamente marginadas. En lugar de reducirlo todo a una sola categoría, se reconoce que existe una gran diversidad dentro de lo que antes se agrupaba simplemente como “comunidad gay”.
Este enfoque también busca dar voz a quienes no se sentían representados en las primeras versiones del acrónimo. Por ejemplo, las personas intersexuales o no binarias no encajaban fácilmente dentro de las categorías tradicionales, y por ello su inclusión ha sido un paso hacia el reconocimiento y la dignidad.
Críticas y debate
Aunque la intención de inclusión es positiva, también hay voces que critican la extensión del acrónimo por considerarla confusa o excesivamente fragmentada. En respuesta, algunas personas prefieren usar términos como “comunidad diversa” o simplemente “comunidad queer” para englobar todas las identidades sin detallar cada letra.
En resumen
Las siglas LGBTIQ+ son un reflejo del cambio social y del reconocimiento progresivo de distintas formas de ser y de amar. Cada letra representa una lucha, una identidad y una historia. Aunque puede parecer complejo, entender su significado es un paso importante hacia el respeto, la empatía y la convivencia.