El Consejo Hotelero del Caribe Mexicano desea expresar su preocupación y desconcierto ante la oposición manifestada por parte de los motociclistas frente a las recientes modificaciones a la Ley de Movilidad del Estado, particularmente en su artículo 218 Bis. Esta modificación responde a una solicitud que ha sido reiterada durante más de una década, motivada principalmente por cuestiones de seguridad pública.
Desde hace años, el uso de motocicletas ha estado vinculado a un gran número de asaltos, donde este vehículo ha servido como medio de transporte y escape para los delincuentes. La seguridad de la comunidad es una prioridad, y es crucial tomar medidas para mitigar estos riesgos.
Además, la preocupación por los accidentes en los que están involucrados conductores de motocicletas y sus acompañantes ha ido en aumento. Muchas de estas tragedias ocurren porque durante la noche, en la oscuridad, los motociclistas no son fácilmente visibles, o porque circulan a altas velocidades con cascos que no cumplen con las normas de seguridad necesarias para proteger sus vidas. Las consecuencias de estos incidentes son devastadoras, con pérdidas humanas que podrían evitarse con una mejor regulación.
Entendemos que este es un tema que abarca múltiples perspectivas, pero consideramos que la seguridad es el aspecto más crucial. Como Consejo Hotelero, respetamos profundamente a los motociclistas y creemos firmemente que la aplicación de esta ley no solo protege sus vidas, sino también las de todos los ciudadanos.
En relación con la seguridad pública, es lamentable que se tenga registro de que las motocicletas son el principal vehículo utilizado para cometer delitos. Esta situación justifica la necesidad de que las motocicletas cuenten con una placa visible y un casco que incluya la identificación correspondiente. De esta forma, se busca reducir la posibilidad de actos ilícitos y proteger a una sociedad que cada día enfrenta mayores desafíos en materia de seguridad.
Sin ánimo de entrar en debates retóricos, apoyamos la presente modificación a la Ley de Movilidad y respaldamos la decisión tomada por el Congreso del Estado. Esperamos que las negociaciones entre las autoridades y los usuarios de motocicletas lleguen a un acuerdo beneficioso para todos, priorizando siempre el bienestar y la seguridad de la comunidad en general.