El Gobierno federal presentó una ambiciosa estrategia para consolidar a México como potencia turística mundial, con una inversión total proyectada de 20 mil 615 millones de dólares, como parte del Plan México. La meta es clara: desplazar a Turquía del quinto lugar y colocar al país entre los cinco más visitados del planeta.
Durante la conferencia presidencial, la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez, explicó que el desarrollo abarcará 22 estados del país, y que se espera que 41.7% de la inversión provenga del extranjero, mientras que el resto será capital nacional.
Uno de los ejes centrales del proyecto es la diversificación del turismo. Se contempla un impulso estratégico al Tren Maya, con el objetivo de atraer más visitantes internacionales, ya que actualmente el 80% de los pasajeros son turistas nacionales.
Además, se destinarán 15 mil millones de pesos a infraestructura turística y a la profesionalización del sector. Esto incluye capacitar a comunidades que desarrollan proyectos de turismo alternativo y sostenible.
Rodríguez detalló que se trabaja en mejorar la conectividad aérea, con un incremento proyectado del 14% en vuelos. Hay 70 destinos prioritarios, de los cuales 20 ya son considerados sustentables.
Con miras al Mundial 2026, se diseñan campañas para vincular las sedes (CDMX, Guadalajara y Monterrey) con otras regiones turísticas. También se buscará proyectar la gastronomía mexicana, así como el patrimonio arqueológico y natural del país.
Para alcanzar el quinto lugar en turismo mundial, México necesitará incrementar en 40% la llegada de turistas extranjeros. Entre enero y abril de este año, llegaron 31.5 millones de visitantes internacionales, incluyendo 13.5 millones de turistas que pernoctaron en el país.
México ya se ubica en el séptimo lugar mundial en sitios Patrimonio de la Humanidad y cuenta con 111 áreas naturales protegidas con vocación turística. El reto está trazado, y la estrategia ya está en marcha.