Liberan al primer procesado por crueldad animal, acusado por prenderle fuego a una perrita en las inmediaciones de la Central de abastos; ‘no es delito grave’
El primer procesado por crueldad animal, identificado como Fidel ‘N’, quedó en libertad luego de que un juez del Tribunal Superior de Justicia (TSJ-CDMX) determinara que ‘prenderle fuego a un perro, no es delito grave’.
En marzo pasado, roció combustible una perrita pitbull llamada Lala, para después le prendiera fuego, Lala quedó con quemaduras en 80% de su cuerpo”.
Durante la audiencia intermedia que se celebró a petición de la defensa del imputado, la parte acusatoria expuso sus puntos y alegatos para evitar que Fidel regresara a las calles.
El abogado del agresor expuso a la juez que el delito que se le imputaba a su defendido no era grave.
Por lo que la ley marcaba beneficios a su favor como un juicio abreviado.
Delito ‘no grave’
El litigante buscaba que su cliente se declarara culpable, reparara el daño y que su sentencia sea mínima y también propuso una prisión domiciliaria para Fidel.
No obstante, la opción del juicio abreviado no fue aceptada por la parte acusadora representada por la presidenta de la asociación protectora de animales ‘Mundo Patitas’, Norma Huerta.
La activista se presentó a la audiencia sin los abogados titulares del caso, ya que la notificación le llegó un día antes de ésta.
Lo cual impidió que la litigante principal que llevó el caso de crueldad animal estuviera presente, ‘debido a que se encontraba fuera de la ciudad’.
Por su parte, pidieron al juez que reconsiderara el poner en libertad al hombre, ‘quien tiene problemas de adicciones’.
Sin embargo, basándose en la Ley, en el Nuevo Sistema Penal Acusatorio y en el Código Penal, dio el beneficio de poner en libertad a Fidel ‘N’.
Bajo las medidas cautelares de una firma periódica, rehabilitarse contra las adicciones, no acercarse a Lala, ni a Huerta, reparar el daño (gastos médicos) y contribuir con la Agencia de Gestión Animal al bienestar de los canes.
Antes de que se diera por terminado el acto judicial, Fidel dijo estar arrepentido de lo que hizo y prometió dejar el alcohol y las drogas y ‘jamás volver a lastimar a un ser vivo.
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