La diva del pop Mariah Carey, y reina indiscutida de la Navidad, cerró el 2019 con una noticia inesperada luego que su cuenta de Twitter fuera hackeada. Las capturas de pantalla compartidas por los usuarios de la red muestran una serie de mensajes inapropiados y ofensivos dirigidos al rapero Eminem. Desde la cuenta de la estrella de la música también se llegaron a publicar algunos comentarios racistas antes de que Twitter la bloqueara.
Según algunos de los tuits, el grupo de hackers ‘Chuckling Squad’ se atribuyó la responsabilidad de haber pirateado la cuenta de la artista que cuenta con 21,4 millones de seguidores. Es el mismo grupo de hackers que tomó el control de la cuenta del CEO de Twitter, Jack Dorsey.
“Tan pronto como nos enteramos del problema, bloqueamos la cuenta comprometida y actualmente estamos investigando la situación”, anunció un portavoz de Twitter a The Hollywood Reporter.
Entre los mensajes que llamaron la atención de los usuarios había uno haciendo referencia a los genitales de Eminem. El ex marido de Carey, Nick Cannon, y el rapero estuvieron involucrados en una disputa pública el año pasado cuando el cantante de hip-hop presumió en una de sus canciones haberse acostado con la diva del pop.
Como era de esperarse, los usuarios de las redes no dejaron pasar inadvertido el inusual movimiento de la cuenta, y el nombre de la diva se convirtió en Trend Topic.
Mariah afrontó el incidente con humor y se burló de lo ocurrido, una vez que los tuits fueron eliminados. “¿Me voy a dormir una maldita siesta y sucede esto?”, tuiteó la cantante.
I take a freaking nap and this happens?
— Mariah Carey (@MariahCarey) January 1, 2020
Pero la estrella también recibió buenas noticias. Su canción clásica navideña la ha ayudado a pasar a la historia como la primera artista en encabezar las listas del ránking Billboard en cuatro décadas separadas. Eso significa que Carey ha tenido una canción número uno en los años 1990, 2000, 2010 y 2020.
‘All I want for Christmas is you’ fue lanzada por primera vez en 1994 y ganó nueva fama después de su inclusión en la banda sonora de la película “Love, Actually”, de 2003.