Durante el primer trimestre del año, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) registró el monto más alto de créditos incobrables en la última década. Estos créditos han alcanzando los 190 mil 460 millones de pesos. Esta cifra es considerada como «baja probabilidad de cobro», ya que los contribuyentes no están localizables, no cuentan con los recursos para pagar o el SAT decide no perseguir el adeudo debido a que el costo del litigio es mayor que el monto que podría recuperar sin procedimiento judicial.
En total, son 400 mil 907 créditos tanto de personas físicas como morales los que se encuentran en esa situación, lo que representa el 27.4 por ciento del total de los adeudos que tienen los contribuyentes con el SAT, donde se incluyen aquellos que sí se pueden cobrar.
Adeudos fiscales
Los adeudos fiscales reportados al cierre de marzo pasado sumaron un millón 552 mil, ascendiendo a 693 mil 746 millones de pesos, de los cuales, 503 mil 285 millones están en alguna fase del procedimiento administrativo de ejecución para su cobro. Según Virginia Ríos, integrante de la Comisión Técnica de Investigación Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), el incremento en el monto de los créditos de baja probabilidad de cobro puede deberse a un mayor número de contribuyentes no localizables, quienes seguramente cerraron sus negocios debido a la crisis generada por la pandemia de Covid-19.
Además, como consecuencia de la pandemia, personas que tributaban ante el fisco fallecieron sin que en muchos casos se haya dado el aviso de cancelación en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), por lo que se siguen enviando notificaciones de adeudos pendientes. Por otro lado, al monto de los créditos no controvertidos se suman 473 mil 207 millones de pesos que el fisco tampoco puede cobrar debido a disputas legales, y solo podrán ser cobrados si los tribunales le dan la razón en el proceso legal.