En el año 2020, se documentaron 250 casos de violencia sexual infantil en el Estado, de los cuales 242 afectaron a mujeres y ocho a hombres. Es preocupante la estadística que de cada mil casos de abuso sexual infantil, se denuncian solo cien, dejando a las víctimas en la invisibilidad.
Estos datos fatales acompañan la exposición de motivos de una Iniciativa de reformas a la Ley de Turismo que el Gobierno del Estado presentó ante el Congreso el mes pasado. El texto reconoce que en la comisión de los delitos de explotación sexual de niñas, niños y adolescentes (ESCNNA), las plataformas de renta vacacional y los hoteles son los lugares más comunes donde pueden ocurrir esos actos ilegales contra menores y mujeres, tales como la producción de videos, fotografías, prostitución forzada y otros, además de ser lugares de residencia temporal de las víctimas, lo que hace que la entidad sea un lugar de origen, tránsito y destino.
La iniciativa propone otorgar facultades a la Secretaría de Turismo estatal (SEDETUR) para prevenir, combatir y erradicar estos delitos, decidir en todos los programas y comités que promuevan la prevención y combate de este flagelo. Así mismo obliga a los prestadores de servicios validar la filiación parentesco, o autorización de los menores que estén acompañados por adultos, sean turistas o visitantes o en su caso, de activar los protocolos de alerta ante las fiscalías especializadas y la Procuraduría de Protección de los Niños, Niñas y Adolescentes y la Familia del Estado de Quintana Roo. Esto incluye a operadores de taxis, agencias de viajes, establecimientos nocturnos, restaurantes y cualquier otro que pueda estar involucrado en las operaciones de redes de trata o explotación sexual. Será la SEDETUR, la encargada de capacitar y sensibilizar a los prestadores de servicios y vigilar el cumplimiento de la ley.
Celebramos que en esta reforma se hacen obligatorios los protocolos para prevenir y luchar contra la explotación infantil y promueve la cultura de la denuncia entre los prestadores de servicios turísticos, en un esfuerzo que comenzó hace años entre organizaciones de la sociedad civil, hoteleros y autoridades. Un paso más para combatir este terrible fenómeno y defender a nuestros niños y adolescentes.
Me despido de ustedes y también los invito a seguirme en Equis, antes Twitter, @Cristinalcayaga