Dos de los últimos modelos de relojes Apple se enfrentan a la interrupción de sus ventas en los Estados Unidos a partir de esta semana, a menos que haya intervención por parte de la Casa Blanca en una disputa internacional relacionada con patentes.
La medida afecta las versiones Serie 9 y Ultra 2 del popular reloj de la compañía tecnológica, que ya no estarán disponibles para clientes estadounidenses en ventas en línea a partir del jueves por la tarde, y en las tiendas físicas a partir del próximo domingo.
Una de las disputas de patentes más trascendentales en años.
— Cerebros (@CerebrosG) December 19, 2023
Apple podría dejar de vender el Watch Series 9 y Ultra 2 en EE.UU. justo antes de Navidad como consecuencia de una disputa sobre la patente del sensor de oxígeno en sangre, según un informe de los medios. pic.twitter.com/Q2JkrNj4SQ
Esta decisión se deriva de un fallo emitido en octubre por la Comisión de Comercio Internacional, que restringe la venta de los relojes de Apple que incluyen la función de medición de oxígeno en la sangre. Este veredicto es parte de una disputa sobre propiedad intelectual entre Apple y la empresa de tecnología médica Masimo.
El gobierno de los Estados Unidos tenía un plazo de 60 días para revisar la orden de la Comisión emitida el 26 de octubre. Mientras tanto, Apple tenía la capacidad de continuar vendiendo los modelos afectados en la Unión Europea hasta la temporada navideña.
Sin embargo, en un comunicado reciente, la empresa con sede en Cupertino, California, anunció la suspensión anticipada de las ventas en cumplimiento con la decisión pendiente.
Esta interrupción en las ventas probablemente supondrá una pérdida estimada entre 300 y 400 millones de dólares en ventas de la temporada navideña para Apple, según Dan Ives, analista de Wedbush Securities.
A pesar de este revés, los analistas proyectan que Apple aún generará alrededor de 120 mil millones de dólares en ventas durante el período de octubre a diciembre, que incluye la temporada de compras navideñas.
Según Ives, la suspensión de ventas de los dos modelos de Apple Watch «no altera considerablemente la situación financiera de la compañía, pero llega en un momento desafortunado».
Aunque hasta el momento, esta situación no ha tenido un impacto significativo en las acciones de Apple, manteniéndolas cerca de su máximo histórico alcanzado la semana anterior. La incertidumbre sobre la resolución de esta disputa y su impacto a largo plazo en la compañía tecnológica sigue siendo una preocupación para los inversionistas y analistas del mercado.