Un Proyecto de resolución de la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos que resuelve sobre una ley del Estado de Misisipi que prohíbe el aborto; fue filtrado a los medios; desencadenando una ola de protestas; pues propone la anulación del derecho a la interrupción del embarazo, legalizado a nivel nacional en 1973. El motivo es que este precedente impide la validez de esta y otras leyes estatales.
De aprobarse, cada estado tendría su propia ley. Se estima que la mitad prohibirían o penalizarían el aborto, lo cual es visto por muchos como un retroceso legislativo de 50 años. El presidente Joe Biden calificó de radical el fallo y declaró que, con ese criterio, la jurisprudencia estadounidense podría cuestionar otros derechos tales como el matrimonio homosexual y la libertad de educación de los hijos.
Creo que la discusión podría centrarse más bien en el límite de semanas de gestación aprobadas para practicar un aborto; este es de entre 12 y 15 semanas en la mayoría de los países que lo permiten. En los Estados Unidos, es de 22 a 24 semanas a raíz de una modificación legislativa en 1992.
En México por ejemplo el límite son 12 semanas y solo ha sido aprobado en Veracruz, Hidalgo, Oaxaca, Baja California, Ciudad de México y está en proceso en Coahuila. El argumento principal ha sido que muchas mujeres mueren por practicarse abortos clandestinos al estar prohibido, y se vuelve un problema de salud pública.
Es un hecho que la discusión entre quienes defienden el derecho a la vida y quienes están a favor del aborto es permanente y que difícilmente se pondrán de acuerdo, por lo que, en la decisión legislativa, es imperativo que prevalezca el interés de salud pública en beneficio de la sociedad y el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo. Se vuelve a abrir el debate que ha sido de enfrentamiento entre demócratas y republicanos, otra vez cerca de las elecciones de este año en noviembre en los Estados Unidos.
Me despido de ustedes invitándoles a seguirme en Twitter @Cristinalcayaga.