Reconstruir los arrecifes de coral en los mares de Malasia es una de las grandes pasiones de Anne-Sophie Roux, una emprendedora social de origen francés, quien desde hace tiempo se dio cuenta que muchas de las soluciones al cambio climático se encontraban en el fondo del mar. Por ello fundó Tēnaka, una empresa social que ayuda a restaurar ecosistemas; se encuentra en una misión de rescata de estructuras subacuáticas de la depredación humana.
Tēnaka, en su reciente encuentro y colaboración con la firma italiana, eco-consciente DoDo, pudo acordar una ayuda para dar un renovado impulso a la lucha que busca restaurar 1,000 metros cuadrados de arrecifes de coral, y devolverle así un poco de lo mucho que le hemos quitado al planeta tierra y sus océanos.
El turismo excesivo y el cambio climático en los mares de Malasia, han provocado que estas estructuras marinas se vean amenazadas, siendo que estos ecosistemas producen el 70% del oxígeno del mundo, por lo que son de vital importancia para la vida de los animales y seres humanos en el planeta.
La organización de origen francés se dedica a restaurar los arrecifes de coral con tácticas innovadoras e instalación de viveros para protegerlos.
El resultado de la asociación entre estas dos firmas dio origen a DoDo por Tēnaka, para lo cual la firma joyera diseñó un brazalete llamado ‘Granelli Tēnaka’, el cual está hecho de materiales reciclados y será de edición limitada.
En lugar de metales preciosos se utilizaron plásticos flexibles y rígidos que son los más difíciles de reciclar. En su mayoría, estos fueron recolectados en el mar mediterráneo y se convirtieron en una joya ecológica de color azul, la cual de inmediato remite el pensamiento a la profundidad y fuerza del mar, de la imperiosa necesidad de proteger los arrecifes de coral.