La presidenta Claudia Sheinbaum anunció un fortalecimiento en la estrategia contra el huachicol en México. A través de una mayor coordinación interinstitucional, el gobierno federal ha incrementado el control sobre el ingreso, distribución y destino del combustible en el país.
En esta estrategia participan la Secretaría de Energía, Petróleos Mexicanos (Pemex), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar), el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF). Todas estas dependencias trabajan en conjunto para rastrear el combustible desde su importación hasta su venta final.
Según Sheinbaum, uno de los indicadores más claros de los avances es el aumento del 15% en las ventas de gasolina de Pemex. Este repunte sugiere una disminución en la venta ilegal de combustible en esa misma proporción, lo que representa un golpe directo al mercado negro.
El SAT ha implementado una plataforma de trazabilidad que permite identificar cuántas comercializadoras de combustible operan y cómo se distribuye el producto. Gracias a este seguimiento detallado, las autoridades han logrado realizar importantes incautaciones de combustible irregular.
Sheinbaum adelantó que el gobierno presentará próximamente un informe global con los resultados completos del combate al huachicol. Este informe incluirá datos sobre decomisos, puntos de distribución intervenidos y avances en fiscalización.
La nueva estrategia busca no solo frenar el robo de combustible, sino también garantizar la legalidad en el mercado energético, aumentar los ingresos públicos y cerrar la puerta a redes delictivas. Con estos avances, el gobierno afirma que el combate al huachicol va por buen camino.
