La carne de cerdo es una proteína muy versátil que se utiliza para preparar diversos platillos de la gastronomía mexicana y del mundo, uno de los más representativos es la cochinita pibil, una combinación ancestral entre carne de cerdo y achiote que se caracteriza por su particular proceso de cocción. Además, se coronó a finales de 2021 como el mejor platillo del mundo según la página Taste Atlas.
En la conmemoración de este tradicional platillo yucateco, que se celebra a principios de mayo, es importante mencionar que la carne de cerdo tiene un alto valor nutricional pues es fuente de Omega 9, que contribuye a reducir el colesterol; así como vitaminas del complejo B y minerales.
La carne de cerdo puede ser una gran aliada para llevar una dieta saludable, pues contrario de lo que muchos piensan, si comemos determinadas partes como el lomo, el aporte de grasas es de tan solo el 9%, aunado a que si este se ingiere en cantidades moderadas constituye una valiosa fuente de energía.
Vale señalar que, en esta proteína animal, también podemos encontrar micronutrientes como fósforo, selenio, sodio, zinc, potasio, cobre, hierro y magnesio, además de vitaminas entre las que destacan la tiamina, la niacina, la riboflavina y el ácido pantoténico, que son beneficiosos para el crecimiento y desarrollo saludable tanto de niños como adultos.
Por otro lado, datos del Consejo Mexicano de la Carne en su compendio estadístico del 2021, informó que el consumo per cápita de carne de cerdo en nuestro país incrementó a 20.3 kilogramos, además, la población tiene preferencia por cortes como el bistec, la costilla y la chuleta.
Mientras que de acuerdo con datos de la Organización de Porcicultores Mexicanos (OPORMEX), durante el primer bimestre del 2022, el consumo de carne de cerdo en México aumentó un 20%. Esto es resultado de las buenas prácticas del sector porcino, así como del compromiso y trabajo de los porcicultores con ofrecer una proteína animal de calidad y con los más altos estándares de inocuidad a la población mexicana.