La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC), presentó un protocolo para la apertura de restaurantes una vez finalizada la Fase 3 y se levante la cuarentena.
En el documento, presentado por la CANIRAC a sus agremiados se dan indicaciones para la apertura de los locales, que van desde la sanitazión profunda, hasta el límite de comensales de acuerdo a sus instalaciones, respetando el metro y medio de distancia entre mesas, la colocación de los insumos solo cuando se siente el comensal, además de asegurar la proveduría de sanitizantes y demás insumos de limpieza.
También se contempla la digitalización del servicio, como es la reserva en línea, menús digitales, entre otras, que reduzcan en contacto físico dentro de los establecimientos.
A esto se suma que los restaurantes tipo bufet ahora tendrán a una persona que se encargará de servir las porciones, quien deberá portar cubrebocas, guantes y caretas todo momento, además de que los alimentos deberán tener una protección antiestornudos y los comensales no podrán estar a menos de metro y medio de distancia de la barra.
La mantelería se deberá cambiar en cada servicio y la mesa se alistará previo a que se sienten los comensales, cambiando utileria y accesorios. Las salas serán servidas al momento de que se sirven los alimentos y en porciones individuales.
Las áreas de niños estarán cerradas en esta etapa de reapertura. Se recomienda el uso de tapetes sanitizantes a la entrada de los restaurantes, colocación de gel antibacterial en diversos puntos de las instalaciones, promover el pago a través de tarjetas electrónicas y limpiar de manera constante el área de caja.
También se deberá vigilar que los trabajadores de todas las áreas usen cubrebocas y realicen periódicamente el lavado de manos por 20 segundos, además de que se deberá de programar la llegada de proveedores a las horas de menos afluencia de comensales, programadas con anticipación.
Dichos lineamientos se deberán acatar una vez finalizada la cuarentena, durante el proceso de reapertura de negocios, dentro del programa conocido como ‘nueva normalidad’, presentada días atrás por el Gobierno Federal.
En Quintana Roo, la CANIRAC dio a conocer que se estima que el 70% de los afiliados se enfrenten a severos problemas económicos, debido a la paralisis que se generó durante la contengencia.