La “cuesta de enero” es una etapa clásica de la economía en México, pero cuando hablamos de Quintana Roo la cuesta se viste de elegancia con sus deliciosos sabores del mar.
Al recordar los inicios de Cancún, debemos tener en mente que en Quintana Roo la pesca siempre ha sido parte de nuestro tejido alimentario; y que la extracción de marisco en las épocas de la fundación de nuestra ciudad no era una práctica con fines lucrativos, pues a decir verdad no era negocio; era, más bien, nuestra tarde coloquial, nuestra diversión, una manera interesante de pasar la horas entre jaibas, cangrejos, langostas y camarones. Eran los tiempos en los que a veces se regresaban a orillas de lo que hoy llamamos Jardín del Arte (bajando el Puente Calinda), lugar que sigue siendo, por tradición, espacio para ir de pesca e invitar a niños y jóvenes a hacer lo mismo.
Los sabores de Quintana Roo, especialmente de su zona norte, son atemporales, diversos, resilientes, resultantes y creativos; son mezcla deliciosa entre lo que sabíamos hacer, pero reinventado con lo que tenemos.
La cuesta de enero en nuestro destino internacional, hace apenas 40 años es hoy día impagable. Es una cruza perfecta de langosta fresca con lo que hay en la alacena pero de importación. Una delicatessen hecha a la carrera, como le llamamos en casa: una verdadera improvisación gourmet, de esas que resultan de la simplicidad y el ya ni modo.
Así nacen platos tan espectaculares como el Coco relleno (un manjar de mariscos y queso de bola); los tamales de langosta y camarón y la receta que te invitamos a probar en esta entrega: Camarones en salsa de sandwichón… Tal cual: una deliciosa forma de conocer nuestro destino a través de los sabores que se han construido y levantado junto con él, sabores muy cancunenses.
Ingredientes para 4 personas
- ½ kilo de camarón fresco con cáscara, sin cabeza
- 1 lata de media crema
- 1 barra de mantequilla
- 2 latas de pimientos morrones en rebanadas
- 1 diente de ajo
- 1 paquete de fideos o pasta de tu preferencia
- Unas hojas de cilantro finamente picado
- Sal y pimienta
Empecemos por pelar los camarones y limpiarlos sin retirarles las coletas. En un recipiente con espacio suficiente, hierve el agua hasta la ebullición. Una vez hirviendo el agua, apaga y vierte los camarones ya pelados con un poco de sal. Retira el agua cuando los camarones se hayan cocido, regresa los camarones y agrega la barra de mantequilla. Déjalos reposar, moviendo un poco para que la mantequilla se impregne en ellos.
Mezcla en una licuadora la crema, los pimientos, la sal, pimienta y el diente de ajo hasta que quede uniforme. Esta crema quedará color salmón pero con un sabor muy parecido al del clásico sándwichón, típico platillo de la gastronomía de toda la península de Yucatán.
Pon a cocer los fideos en agua hirviendo; déjalos al dente retirándolos del fuego sin apagar la flama y retira el 95 por ciento del agua. Agrega el agua almidonada restante a la crema de la licuadora; regresa la combinación de la pasta y la crema a la olla y cocina a fuego lento hasta que quede una mezcla uniforme. Retira del fuego, espera 10 minutos para evitar el vapor. Incorpora los camarones en el platillo mezclándolos suavemente. Espolvorea un poco de cilantro picado, para impulsar el sabor.
Sirve y disfruta esta combinación interesante, resultado de la improvisación mágica de un platillo que es muy nuestro: el sandwichón que, combinado con nuestros deliciosos frutos del mar -puede prepararse también con langosta, pulpo, calamar o la mezcla de todos ellos- te hará descubrir la identidad gastronómica que nació y sigue viva en nuestras muy cancunenses cocinas.
Eduardo Sánchez Cetina en FacebooK: https://www.facebook.com/eduardo.sanchezcetina