El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticó este miércoles la decisión de Tesla de aplazar la construcción de una fábrica de autos eléctricos en el país a la espera del resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos. En una conferencia de prensa, López Obrador expresó su descontento con la postura del magnate Elon Musk, calificando la medida como «no seria».
La polémica surgió luego de que Musk, quien apoya firmemente al candidato republicano Donald Trump, manifestara su preocupación sobre el posible impacto de una victoria de Trump en el plan de Tesla para construir una «megafábrica» en México. Este proyecto, anunciado en marzo de 2023, implicaba una inversión de aproximadamente 5.000 millones de dólares. Trump ha prometido imponer aranceles «fuertes» sobre los productos mexicanos, lo que ha generado incertidumbre sobre la viabilidad del plan.
«Creo que necesitamos ver dónde están las cosas después de las elecciones», declaró Musk al informar sobre una significativa caída en las ganancias de Tesla en el segundo trimestre. Esta caída se debe a la reducción de precios de los vehículos eléctricos y al incremento de gastos en tecnologías como la conducción autónoma.
López Obrador subrayó que a Estados Unidos no le conviene fabricar sus propios vehículos debido a los altos costos de producción. Además, planteó la posibilidad de que la decisión de Musk pudiera tener un componente especulativo, sugiriendo que Tesla podría estar utilizando el anuncio para influir en los mercados financieros.
Por su parte, Claudia Sheinbaum, sucesora y copartidaria de López Obrador, minimizó la importancia del retraso, destacando que desde el anuncio inicial no ha habido muchos avances en el proyecto. Sheinbaum se mostró convencida de que, independientemente de quién gane las elecciones en Estados Unidos, el Tratado de Libre Comercio (T-MEC) entre Estados Unidos, Canadá y México continuará beneficiando a los tres países.
La planta de Tesla está proyectada para ser edificada cerca de la ciudad de Monterrey, en el noreste de México. López Obrador, quien ha calificado a Trump como su «amigo», no descartó la posibilidad de que detrás del anuncio de Musk exista un ánimo especulativo, sugiriendo que las empresas a menudo generan noticias para incrementar el valor de sus acciones en el mercado, relegando la producción a un segundo plano.
Finalmente, el presidente mexicano contextualizó las advertencias de Trump como parte de la retórica electoral, insinuando que las campañas políticas suelen estar cargadas de pasión y que las circunstancias pueden cambiar después de las elecciones.
En resumen, la decisión de Tesla de aplazar su proyecto en México ha generado críticas y especulaciones sobre las verdaderas motivaciones detrás de esta medida, en un contexto de incertidumbre política y económica tanto en México como en Estados Unidos.