Si eres emprendedor con problemas de organización será mejor que replantees algunas conductas que afectan tu negocio y tus ventas
De igual forma es necesario aprender del fracaso para no caer de nuevo en errores como los siguientes.
No saber innovar
A veces queremos reinventar los procesos productivos o de creatividad del negocio, es válido pero siempre hay que tener en mente que cada proceso de innovación debe tener un objetivo y debe cumplirse.
Recuerda informarte bien y acudir a un experto si es necesario, para evitar cualquier efecto negativo en tu negocio.
Copiar ideas
Los clientes siempre van a apreciar la originalidad de lo trabajos, ojo, una cosa es ser parte de una tendencia o moda y otra completamente distinta es copiar el trabajo de otra empresa. Más allá de esto, copiar de manera parcial o total un producto puede conllevar a una violación de derechos de autor, que puede ocasionar problemas legales.
Tener mala actitud
Toda la inversiones en marketing que hagas en tu negocio se va a la basura en un segundo si al cliente lo atienden con mala actitud, de ahí viene la importancia de generar un código de conducta para atender clientes y verificar que los demás colaboradores lo cumplan.
Tomas muchos riesgos
Ser emprendedor se trata de tomar riesgos pero no a la ligera. Correr riesgos no es lo mismo que poner en riesgo tu negocio, aprende a calcular los impactos que puedan repercutir en tu negocio y decidir cuándo es el momento óptimo.
No controlar la agenda
El timepo es oro, tanto tuyo como de tus clientes, determina un tiempo mínimo y uno máximo a cada proceso de tue empresa para así llevar mayor control en la agenda, siempre trata de ser puntual si tienes algún trato con los clientes pues algunos prefieren ir a otro lugar donde se les atienda en tiempo y forma.
No saber manejar crisis
Al igual que el código de conducta, un manual de crisis es muy importante en una empresa, detalla alguna situación hipotética para generar la solución y cuando la situación se presente en realidad puedas saber cómo solucionarla. Busca situaciones que se adapten a tu negocio, por ejemplo, si es un negocio de ropa, que hacer si un cliente quiere devolver una prenda en mal estado.