A 15 días del segundo cierre de la frontera estadounidense a las exportaciones de ganado mexicano en pie, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, informó que sostendrá una llamada con la secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, para evaluar la situación sanitaria y discutir las acciones tomadas frente al brote de gusano barrenador.
A través de una publicación en la red social X, Berdegué indicó que seguirá informando sobre el desarrollo de esta crisis sanitaria, aunque no ofreció detalles adicionales sobre los acuerdos alcanzados o medidas nuevas.
El cierre actual es el segundo desde que se detectó el primer caso del parásito en Chiapas, a finales de noviembre. Aunque hubo una reapertura temporal, el 11 de mayo se anunció un nuevo cierre de 15 días, que concluyó el día de ayer.
De acuerdo con Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), más de 65 mil cabezas de ganado —valuadas en aproximadamente 78 millones de dólares— han quedado varadas durante este periodo. Hasta el 10 de mayo, solo 30 mil 964 animales fueron exportados, por un valor estimado de 37.1 millones de dólares.
Anaya señaló que el Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas de Estados Unidos realizará una visita a México para revisar las medidas implementadas por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
Acciones preventivas
Actualmente, la Secretaría de Agricultura, junto con los gobiernos estatales de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango y Tamaulipas, ejecuta un programa de inspección total del ganado con el objetivo de evitar la propagación del gusano hacia el norte del país y permitir la reanudación de exportaciones.
Como parte del plan de contención, se plantea dividir al país en tres zonas sanitarias: una zona afectada (principalmente en el sur-sureste), una de amortiguamiento (entidades aún libres del parásito, pero sin certificación para exportar), y una zona libre (que incluye a Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango y Tamaulipas), que actualmente tiene luz verde para exportaciones bajo estrictas inspecciones.