Especialistas financieros han emitido advertencias sobre las consecuencias que podría acarrear el considerable déficit fiscal proyectado para el año 2024. Según el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para dicho año, se espera un Requerimiento Financiero del Sector Público del 5.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), en contraste con el 3.9 por ciento estimado para el presente año 2023.
Mario Correa, ex presidente del Comité Técnico Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), expresó su preocupación al respecto. Afirmó que esta situación podría obligar al próximo Gobierno federal a implementar recortes significativos en el gasto público para estabilizar nuevamente las finanzas del país. Correa subrayó que esta medida no se alinea con los principios de disciplina fiscal, los cuales dictan que el gasto público debe ser acorde con los ingresos previstos.
En contraposición a estas preocupaciones, la Secretaría de Hacienda ofrece un panorama optimista. El subsecretario Gabriel Yorio aseguró que las proyecciones para el año 2024 muestran un entorno de estabilidad, con un crecimiento real del PIB estimado entre el 2.5 y 3.5 por ciento, además de aumentos tanto en las inversiones públicas como privadas.
Según lo explicado por funcionarios durante una comparecencia ante diputados, se estima un ingreso de 9 billones de pesos para el año en curso, de los cuales 6.4 billones se destinan al gasto programable.
No obstante, la agencia calificadora Moody’s ha lanzado sus propias advertencias sobre la situación. Renzo Merino, vicepresidente de la calificadora, señaló que las cuentas fiscales iniciarán desde un punto de debilidad mayor que hace seis años. Adicionalmente, mencionó que algunas de las presiones fiscales planteadas representarán un desafío de política más complejo para la próxima Administración.
Estas divergentes perspectivas plantean un escenario de incertidumbre en cuanto a las medidas que podrían adoptarse para hacer frente al elevado déficit fiscal previsto para el año 2024, generando debates y preocupaciones en el ámbito financiero y político del país.