El nuevo presidente electo de Argentina, Javier Milei, no solo está decidido a llevar a cabo cambios drásticos en la política y la vida del país, sino que también tiene en la mira una de las pasiones más arraigadas entre los argentinos: el fútbol. Con un pasado como portero y canterano de Chacarita Juniors, hincha y socio actual de Boca Juniors, Milei no es ajeno a las tensiones del mundo futbolístico, como lo demostró al ser abucheado e insultado por los hinchas de Boca tras depositar su voto en las recientes elecciones presidenciales del club.
Pocos días después de asumir la presidencia, Milei dio a conocer una serie de medidas, incluyendo el polémico Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que, por el momento, ha sido paralizado por la Justicia. Entre las disposiciones más controvertidas se encuentra el punto 27, que propone modificar la Ley de Sociedades y permitir que los clubes de fútbol argentinos se conviertan en sociedades anónimas, si así lo desean.
Intenso debate
La propuesta del presidente argentino ha generado un intenso debate en la sociedad y especialmente en el ámbito futbolístico. Según el decreto, para que un club se transforme en sociedad anónima, sería necesario contar con el voto de dos tercios de los asociados. Además, se establece que no se puede impedir, dificultar ni privar de ningún derecho a una organización deportiva, incluyendo su afiliación a entidades como confederaciones, federaciones, asociaciones, ligas o uniones.
La intención de Milei, que ya fue planteada por el expresidente Mauricio Macri en el pasado, busca liberar a los clubes de fútbol de las limitaciones impuestas por sus socios y abrir la puerta a la entrada de capital privado, tanto nacional como extranjero. En este sentido, Milei mencionó en una entrevista que el Chelsea inglés estaría interesado en comprar un equipo argentino, siguiendo el modelo del City Group del Manchester City. Además, grupos árabes podrían invertir grandes sumas de dinero en los clubes argentinos.
Federación del Fútbol Argentino
Esta propuesta, sin embargo, va en contra de los estatutos de la Federación del Fútbol Argentino (AFA), que tendrían que ser modificados en su Asamblea General para que la medida pueda ser implementada. La Confederación Argentina de Deportes (CAD) presentó un recurso de amparo para suspender cautelarmente las medidas del DNU, advirtiendo que, de aprobarse, Argentina podría enfrentar sanciones de FIFA y CONMEBOL, lo que pondría en riesgo la participación del país en competiciones internacionales como la Copa América y los Juegos Olímpicos de París.
A pesar de la intención de Milei, los clubes de fútbol argentinos se han mostrado mayoritariamente en contra de la propuesta. Boca Juniors ratificó su carácter de Asociación Civil sin fines de lucro, respetando sus principios defendidos durante casi 120 años. River Plate expresó su rechazo a las sociedades anónimas, siguiendo el espíritu de sus fundadores, y otros clubes como San Lorenzo, Newell’s Old Boys, Independiente y Racing también defendieron sus estatutos como asociaciones civiles sin fines de lucro.
La Liga Profesional de Fútbol de Argentina (LFP), que agrupa a un centenar de equipos, emitió un comunicado respaldando la posición de los clubes y enfatizando que las instituciones pertenecen a aquellos que las sostienen con sus aportes.
El tiempo dirá si la propuesta de Milei logra imponerse en el complejo escenario del fútbol argentino, o si, como ocurrió en el pasado, la resistencia de los socios y aficionados prevalecerá, manteniendo la esencia de los clubes como asociaciones civiles sin fines de lucro.