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    OpiniónMes del testamento en medio del Covid: Paulina Mérigo

    Mes del testamento en medio del Covid: Paulina Mérigo

    Opinión

    Septiembre es el mes del testamento a nivel nacional; esta iniciativa nace para motivar, promover y facilitar a realizar este instrumento jurídico dando seguridad patrimonial al heredar tranquilidad a las familias y beneficiarios.

    Sin embargo, los lamentables fallecimientos por el COVID 19 exponen que más del 95% de las víctimas murieron sin tomar decisiones, es decir, fallecieron sin haber otorgado un testamento, de acuerdo a los datos obtenidos del registro de avisos de testamentos de la Secretaría de Gobernación.

    Durante el mes de septiembre e incluso el mes de octubre, los Notarios de todos los estados de la República Mexicana extienden sus horarios de atención, brindan asesoría en materia testamentaria a las personas y reducen los costos del testamento hasta en un 50%, por ello es importante aprovechar los beneficios que se ofrecen mientras se encuentren vigentes.

    Dicha iniciativa tiene el objetivo de facilitar a los mexicanos el dictado de su testamento, en respuesta a que, en México, solo uno de cada 20 adultos cuenta con testamento.

    Al hacer un testamento, ordenamos nuestros documentos, heredando no solo bienes sino también tranquilidad a nuestros seres queridos. Evitamos gastos mayores, pérdida de tiempo y problemas familiares. Al haber un testamento, se evita la necesidad de pasar por un juicio sucesorio intestamentario en el que se invierte demasiado tiempo, dinero y esfuerzo.

    Con el testamento, los bienes del testador pasan fácilmente y de forma inmediata a las personas que el mismo testador quiera y en la proporción que él mismo disponga. Es una medida para proteger su patrimonio.

    El testamento es revocable; es decir, puede ser modificado cuantas veces el testador lo desee, dando libertad a disponer los bienes.

    Existen dos tipos de testamentos con el mismo valor legal;

    • El público y abierto, que se realiza en las notarías con un precio de dos mil 148 pesos aproximadamente y
    • El ológrafo, es la elaboración del documento a bajo costo hecho de puño y letra de la persona interesada, cuyo costo es de 290 pesos, el cual tiene sentido social y va dirigido principalmente a la población de escasos recursos.

    El testamento público y abierto puede efectuarlo cualquier mayor de 16 años en pleno uso de sus facultades mentales, se debe presentar acta de nacimiento, Clave Única de Registro de Población (CURP) y dos identificaciones.

    De los 31 estados de la republica sólo en 11 de estos se requiere la presencia de testigos para realizar un testamento. En algunos estados se requieren hasta tres testigos como en el caso de Yucatán, en el resto de las entidades federativas únicamente se solicitan testigos cuando el testador no sepa leer, escribir, firmar, fuese ciego, sordo o no hable español.

    Situaciones como las que estamos viviendo nos ha enseñado que debemos estar preparados respecto a nuestro patrimonio, también que las autoridades deben ser menos burocráticas y evitar procesos incomodos y complicados.

    El otorgamiento de testamentos ordinarios en México es un acto regulado de forma estricta, exige la comparecencia personal del interesado frente a un notario y/o actos de registro administrativo de la última voluntad.

    En una situación como la actual, en donde convivimos con un virus sin precedentes, de fácil transmisión y con frecuencia letal, elegir romper el aislamiento y salir a otorgar testamento, es una decisión muy arriesgada.

    Estados como Zacatecas, Chihuahua, Coahuila, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Tabasco, Tlaxcala, y Yucatán debieran modificar el código y adaptarlo para que fuese mas ágil y sencillo, realizar el testamento sin necesidad de que al menos cuatro personas tengan que asistir a la firma de la realización de un testamento.

    Para las familias de los fallecidos, la tragedia de la pérdida humana no es la única que experimentarán en los siguientes meses. La incertidumbre del destino de sus bienes y deudas perseguirá a sus familiares por muchos años por venir.

    No esperemos a llegar a una situación como esta, tenemos que estar preparados, tener claro como se distribuirán nuestros bienes para tranquilidad de todos. ¡Es momento para hacer tu testamento decide sobre el destino de tus derechos y obligaciones!

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