La meditación es un auxiliar en la pérdida de peso, no por medio de hipnosis ni mucho menos, sino que te sintoniza con tu cuerpo.
Es claro que para llegar a tu peso ideal debes llevar una buena alimentación y hacer ejercicio, pero para facilitarte este proceso puedes meditar.
De acuerdo a un estudio de ‘World Obesity Federation’, la meditación ‘mindfulness’ ayuda a cambiar comportamientos relacionados con problemas de obesidad.
Reducir la ansiedad te ayuda a comer menos
La Universidad de California, en San Francisco, observó dentro de un grupo de personas estresadas y con sobrepeso, aquellas que meditaban reportaban mayor disminución de ansiedad por comer.
Resultando una reducción de su grasa abdominal, esto sin ningún cambio en su dieta.
De igual forma otro estudio arrojó que dentro de un grupo de mujeres que experimentaban mucho estrés encontraron que aquellas que habían tomado un breve curso de meditación presentaron menor estrés basado en la recompensa y perdieron más peso que las mujeres que no tomaron la clase.
Aprendes a reconocer señales de hambre.
De igual forma, la meditación permite mejorar nuestra conciencia a señales de hambre y saciedad.
Esto te ayuda a reconocer cuando tienes hambre, parar cuando estás satisfecho y distinguir cuando es ansiedad que te provoca comer.
Tendrás más y mejores horas de sueño.
La meditación genera melatonina, una hormona que nos ayuda a dormir y permanecer dormidos. De acuerdo a un estudio, las personas que meditan pueden llegar a tener hasta cinco veces más melatonina que aquellos que no la practican.
Por qué es importante ya que tener horas de sueño reparadoras mejoran la manera en la que hacemos las cosas y tenemos más energía para realizar ejercicio.
Tomas mayor conciencia.
En la meditación se desarrolla el sentido de pertenencia y la conciencia de quienes somos y por qué somos, esto puede ayudar a replantearte los hábitos que te hacen subir de peso o los que no te permiten llegar a tu peso ideal.