Hoy vamos a hablar de ópera. Tuve la oportunidad de disfrutar la obra “Un Baile de Máscaras” de Giuseppe Verdi, presentada por la Metropolitan Ópera de Nueva York, en el Lincoln Center. La trama original relata el asesinato del Rey Gustavo Tercero de Suecia en 1792, pero esta adaptación la sitúa en una sociedad contemporánea. Está escrita de una manera preciosa. Las voces, la música y el elegante vestuario; son de lo mejor y la escenografía de estilo minimalista, cambia constantemente atrapando la atención del público. Para quienes no entienden italiano, ponen letreritos en los respaldos del asiento de enfrente. Imagínense todos estos recursos para ver otras óperas famosas de Verdi, por ejemplo; Aída, que es espectacular; La Traviata o Rigoletto.
La mayoría de la gente siente que la Ópera es para un grupo de personas muy reducido, o sea, que es elitista, por cuestión social o cultural; pero en realidad este género es para quien quiera disfrutarla. Relata historias y es impactante el cambio cuando la gente se da cuenta de qué se trata porque en algunos casos, se identifican con la historia.
Recuerdo que vi una presentación en el Parque de las Palapas aquí en Cancún. Estaba Laura Chuc, la conocida soprano quintanarroense. Me sorprendió que la gente -bueno-, estaba atentísima; inclusive los niños. También había personas de pie que no alcanzaron lugares y otras se sentaron en el suelo y permanecían en silencio disfrutando el espectáculo. También hace años con motivo del Festival del Caribe, la cantante hizo una presentación pública en el parque conocido como el Crucero; fue uno de esos performances, que le dicen, en que de repente los músicos y los cantantes ataviados con ropa de diario, -de todos los días-, salen de entre la gente común que está transitando y ejecutan su presentación. Fue fantástico.
Ojalá surjan más iniciativas que apoyen la ópera y que acerquen más a la gente con esta música que es vehículo de cultura, conocimiento y sobre todo de disfrute, porque la música, como se dice, es un idioma universal; es para todos y para todas.
Me despido y les invito a seguirme en Twitter @Cristinalcayaga.