En un tweet del lunes la Diputada Dulce María Sangri comunicó que el grupo parlamentario del PRI la propuso a ella como presidenta, a Sara Rocha como vicepresidenta, y a Martha Garay como Secretaria, para integrar la Mesa Directiva del siguiente año legislativo en la Cámara de Diputados. Las 3 son mujeres comprometidas con México.
La posición le corresponde al PRI como tercera fuerza política, por haber alcanzado 50 diputados, sobre 46 del PT y, además, porque es un acuerdo fundacional entre Morena, el Pan, y el PRI que este último presidiera la Cámara en el tercer año legislativo.
Se tenía que haber logrado un acuerdo para elegir la presidencia, pero no sucedió así porque no fue alcanzada la votación necesaria, debido a que el Partido del Trabajo se opuso pues quieren la presidencia de la Cámara aún sin representar a la tercera fuerza política. El PRI debía obtener 302 votos de 454 diputados, pero sólo logró 278 votos, 112 en contra y 68 abstenciones con lo que se quedó a 24 votos para alcanzar la mayoría calificada, es decir las dos terceras partes del pleno.
La razón por la que no hubo mayoría calificada en la sesión se debe a que un diputado del Partido del Trabajo se ha empeñado en reventar el acuerdo y en causar un daño al poder legislativo y a la nación; lo cual lo deja en una situación deplorable porque se ha auto declarado presidente “por sus pistolas” El PT se ha caracterizado por manejarse según le conviene, juega con el voto y no respeta los acuerdos parlamentarios. A pesar inclusive de que el presidente Andrés Manuel López Obrador les ha pedido respetar la ley y no pelear por puestos sin fundamento. Esto definitivamente ensombrece el segundo informe de gobierno.
La ley contempla un plazo de gracia hasta el 5 de septiembre por lo que la presidenta Laura Rojas seguirá presidiendo la cámara hasta el sábado, pero después de eso no hay previsión legal alguna. Adicionalmente estaríamos ante un caso de violencia política de género contra las diputadas propuestas. Estamos en espera que se den los acuerdos para evitar un conflicto mayor.