A principios del año 2024, México enfrenta un aumento significativo en los contagios de COVID-19, atribuido a las variantes Pirola, consideradas altamente contagiosas. La emergencia sanitaria ha llevado a las autoridades a recomendar la reintroducción del uso de cubrebocas en varios estados del país, aunque aún no se ha declarado de manera obligatoria. La recurrencia del virus y el incremento en la ocupación hospitalaria han generado preocupación entre las autoridades sanitarias.
Durante el primer trimestre del año 2020, la pandemia de COVID-19 tuvo un impacto considerable en México y en el mundo. A pesar de meses de esfuerzos y restricciones, la emergencia sanitaria se declaró concluida. Sin embargo, con la llegada del nuevo año, la posibilidad de un rebrote se manifiesta. La Secretaría de Salud ha identificado un aumento en la ocupación hospitalaria, instando a las autoridades a emitir recomendaciones para contener la propagación del virus. Estas medidas no son obligatorias por el momento, pero podrían implementarse si los casos continúan en aumento.
Específicamente, las autoridades han señalado a la Ciudad de México, Estado de México, Coahuila, Tamaulipas, Querétaro y Veracruz como regiones donde se sugiere retomar el uso de cubrebocas en lugares públicos, acompañado del uso de gel antibacterial. Según el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedad Respiratoria Viral (SISVER), se han reportado al menos 130 casos nuevos, incluyendo la variante Pirola y otras formas del virus. Es crucial seguir las recomendaciones de las autoridades de salud para prevenir un aumento mayor en los contagios.
Unidades médicas enfrentan alta ocupación hospitalaria en cinco estados mexicanos, con niveles que oscilan entre el 80% y el 100%. Este fenómeno, agravado por la prevalencia de enfermedades respiratorias y el COVID-19, ha situado a la región central del país como la más afectada, con la posibilidad inminente de saturación hospitalaria. De acuerdo con datos del Sistema de Información de la Red IRAG, la ocupación de camas en hospitalización general sigue siendo una constante.
Hospitales con tasas de ocupación más elevadas incluyen el Hospital General Dr. Aurelio Valdivieso en Oaxaca (100%), el Hospital General del Valle del Mezquital Ixmiquilpan en Hidalgo (100%), el Hospital General Patzcuaro en Michoacán de Ocampo (100%), el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Juárez en la Ciudad de México (100%), el Centenario Hospital Miguel Hidalgo en Aguascalientes (86%) y Morelia en Michoacán de Ocampo (83%).
El aumento de casos de influenza, enfermedad que tiende a intensificarse de diciembre a febrero, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC), podría ejercer presión adicional a un sistema de salud ya desafiado. Frente a esta creciente presión hospitalaria, la Secretaría de Salud (SSA) ha enfatizado la importancia de la vacunación contra el COVID-19, especialmente dirigida a los adultos mayores de 60 años y a los sectores más vulnerables de la población.
La situación actual destaca los desafíos que enfrenta el sistema sanitario en México, obligado a responder simultáneamente a la demanda generada por casos de COVID-19, influenza y otras enfermedades respiratorias en una época del año particularmente crítica debido a las condiciones climáticas y las dinámicas sociales que favorecen la propagación de virus.